Iglesia Central

La IEBC fue fundada por el Pastor César A. Ramos Fonseca y esposa, en el mes de Septiembre del 2002 iniciada en una reunión familiar, fue organizada el 3 de diciembre del 2005.Hoy entendemos que como hijos de Dios no solamente tenemos un llamado al ministerio, si no que también estamos siendo formados para ejecutar el plan y sueño de Dios de ganar almas, fortalecer a nuevos creyentes, discipularlos y enviarlos como sembradores de nuevas iglesias.

martes, abril 25, 2006


Cuarto Mensaje Iglesias en los Hogares
¿Cómo vives a Cristo?

"Jesús salió de ese lugar y se fue para su pueblo junto a sus seguidores. Cuando llegó el día de descanso, Jesús comenzó a enseñarles en la sinagoga. Muchos estaban muy impresionados por lo que escuchaban, y decían: --¿De dónde sacó este hombre todo esto? ¿Cómo pudo conseguir tanta sabiduría? ¿De dónde sacó el poder para hacer los milagros que hace? ¿Acaso no es este el carpintero hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿No viven sus hermanas aquí también entre nosotros?". No podían aceptar a Jesús..." (Marcos 6:1-3. La Palabra de Dios para todos).

1.- Base Bíblica: Marcos 6:1-6

2.- La meta para hoy:
El propósito que nos mueve hoy es que aprendamos sobre la prudencia y la sabiduría cuando se desplieguen ataques en contra nuestra por ser cristianos.
También que aprendamos que vivenciar a Cristo no es caer en el fanatismo, sino en demostrar con nuestros hechos en Quién hemos creído.

3.- Desarrollo de la Lección:

Librando la lucha por vivir a Cristo en la sociedad

Gonzalo dejó de llegar los domingos en la mañana después de haber permanecido fuera de casa por espacio de dos días sin decir dónde y con quién estaba. Su esposa tampoco necesitaba saberlo. Anticipaba que estuviera bebiendo y con mujeres. Su costumbre de muchos años. Sin embargo el dejo de irse de juerga.

--No creo en tu cambio—le gritó fuera de casillas--. Ver para creer--, gritó.

Los vecinos del barrio cruzaban palabras cuando veían a Juan Ramirez. Lo conocían como ladrón. El primer pensamiento que venía a sus mentes apenas lo veían, era que no querían ser víctimas. "No teman, he cambiado", les decían. Nadie podía creerlo. Y preferían huirle. "Hombre precavido vale por dos", solían comentar al mantener el por qué se iban por otro camino para no cruzarse con él.

Ya no creaba riñas con todos. Ayudaba en casa con los quehaceres domésticos, especialmente el sábado y domingo. Su madre estaba conmovida pero el padre no. "No puedo creer que este muchacho cambie así por así, de la noche a la mañana. Sin duda quiere engañarlos", comentaba su padre.

Le suena familiares estos dos casos. Es más, quizá ha protagonizado un incidente así. Aunque ha experimentado cambios en su forma de pensar y de actuar, enfrenta el escepticismo de los demás. Son capaces de creer en los cambios de otros y no en los suyos.
¿Le ha ocurrido? Es probable que sí: en el trabajo, en el lugar en donde estudia o tal vez en su hogar. Una situación es desalentadora; pero, ¿cómo enfrentarla?

La vida a la manera de Dios

Si usted busca vivir a Cristo allí donde se desenvuelve, seguramente encontrará opositores. Buscarán motivos para criticarles. Bueno o malo, lo que sea que haga, desencadenará cuestionamientos. ¿Cuál es la razón? Cuando vivimos la vida a la manera de Dios y no de acuerdo con los parámetros que nos traza el mundo, los demás se sentirán amenazados porque está yendo en contracorriente, y encontrarán la menor oportunidad para hacerle sentir mal.

En la Biblia hallamos un incidente revelador en torno al Señor Jesús: "Jesús salió de ese lugar y se fue para su pueblo junto a sus seguidores. Cuando llegó el día de descanso, Jesús comenzó a enseñarles en la sinagoga. Muchos estaban muy impresionados por lo que escuchaban, y decían: --¿De dónde sacó este hombre todo esto? ¿Cómo pudo conseguir tanta sabiduría? ¿De dónde sacó el poder para hacer los milagros que hace? ¿Acaso no es este el carpintero hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿No viven sus hermanas aquí también entre nosotros?". No podían aceptar a Jesús..." (Marcos 6:1-3. La Palabra de Dios para todos).

Hombres y mujeres de Nazaret, no podían concebir ni aceptar que aquél con quien habían convivido tanto tiempo, ahora fuese un poderoso instrumento de Dios. Si realiza una nueva lectura del pasaje encontrará que:

1.- Rechazaron la enseñanza de Jesús.
2.- Cuestionaron su conocimiento de Dios.
3.- Pusieron en tela de juicio no solo su formación sino también el que no era de una línea sacerdotal sino de una familia tradicional de su pueblo.

¿Qué hacer frente al rechazo?

Para el Señor Jesús lo más importante no era lo que dijeran los demás, sino su compromiso con Dios el Padre. No necesitaba rótulos que lo identificaran como Hijo del Altísimo. Tampoco usted o yo los necesitamos. El Maestro sabía que testificaba con sus hechos más que encendiendo debates religiosos o filosóficos. De nada sirven. Alientan la discordia pero no resolverán la situación porque los opositores están empecinados en creer su "propia verdad" y generarán conflicto así tengamos nosotros la razón.

Comprenda que los contradictores o críticos no están atacándolo a usted sino al Dios en el que usted ha creído, porque su vida testifica de Él, le pertenece a Él y busca glorificarlo a Él.
Observe cuidadosamente la reacción del Señor Jesús frente a los ataques que desplegaron en su contra un enorme grupo de incrédulos: "...pero él les dijo:--Se honra a un profeta en todas partes. Pero nadie es profeta en su propio pueblo y en su propia casa." (Marcos 6:4. La Palabra de Dios para todos).

¿Qué trataba de decirles? Que era en su propio pueblo donde no podían reconocer que alguien era distinto y no sujeto a una forma de obrar sujeta a lo que piensa y dispone el "común de las personas". El amado Señor Jesús no polemizó ni respondió con ataques. Respondió con amor y sabiduría. Usted y yo también podemos obrar prudentemente cuando se generen situaciones imprevistas y en otras circunstancias provocarían nuestra reacción negativa.

Ore por los incrédulos, no se sienta herido

Pese al accionar de los críticos y opositores, usted y yo debemos seguir adelante, tomados de la mano del Señor Jesucristo. Lo aconsejable es no prestar atención a palabras necias. Hacerlo es perjudicial para sus relaciones interpersonales y su crecimiento espiritual.

Cada cual recibe lo que sembró. Es un principio bíblico que tiene aplicación en todos los países y en todas las personas. Sin duda el dolor que causó al Señor Jesús no fueron las críticas de aquellos moradores de Nazaret sino el que cerraran las puertas a Dios. "Y Jesús no pudo hacer ningún milagro allá. Lo único que hizo fue imponer las manos a algunos enfermos y sanarlos. Y estaba muy sorprendido de la falta de fe de la gente de su pueblo. Así que siguió hacia los otros pueblos enseñando a la gente." (Marcos 6:4-6. La Palabra de Dios para todos).

Siga adelante. No se detenga. Permanezca firme con el Hijo de Dios. Nada podrá derribarlo, si está tomado de mano. ¡La victoria está asegurada!

4.- Retos personales para la semana:

En oración delante del Señor Jesús pediré:
4.1.- Fortaleza para enfrentar sabiamente todo brote de oposición con respecto a mi compromiso con Dios.
4.2.- Sabiduría para dar testimonio de vida cristiana delante de los demás, sin recurrir a posiciones fanáticas o rótulos que busquen llamar la atención respecto a mi fe.
4.3.- Prudencia para no alentar polémicas filosóficas o religiosas con aquellos que critican mi decisión de ser fiel a Dios la disposición de dar testimonio de vida cristiana.

5.- Lecturas Bíblicas Devocionales:

Es importante la meditación diaria en las Escrituras. Nos ayudan en el proceso de crecimiento personal y espiritual. Para ayudarle en este proceso, publicamos las siguientes citas

Lunes: Marcos 4:26-29; Martes: Marcos 4:30-34; Miércoles: Marcos 4.35-41; Jueves: Marcos 5:1-20; Viernes: Marcos 5.21-43; Sábado: Marcos 6:1-5; Domingo: Marcos 6:7-13.